Bajo la sombra de la Élite

Después de casi un mes dando la coña con el CEU, vamos a terminar explicando un poco qué tal fueron las competiciones, que para algo este es un blog de orientación.

La distancia Media fue una carrera bastante rápida, para disfrutarla. Resultados dispares para la tropa universitaria. Alberto y Laura fueron los mejores de los nuestros quedando justo detrás de los élites. Tras la carrera comentábamos Alberto y yo que nos da la impresión de que nos falla un poco la concentración, quizás no fallamos demasiado, pero podemos ir más rápido de lo que realmente vamos. Te das cuenta de ello cuando te adelanta alguno de los élites y ves que puedes seguir su ritmo sin fallar, pero claro, yendo tú sólo es más complicado saber si estás en la velocidad adecuada. Eso hay que entrenarlo, pero al menos nos hace ver que realmente no están tan lejos.

El sprint era la carrera que yo esperaba con más ganas. Mira que he corrido pocos, pero tengo la corazonada de que las pruebas urbanas pueden ser mi especialidad. El casco histórico de Teruel es un escenario perfecto para este tipo de carreras, y la verdad es que no desentonamos en absoluto. En esta ocasión me tocó a mí quedar justo por detrás de los élites, pero también hay que destacar la buena carrera que hicieron Cristina y Esther, consiguiendo entrar en la clasificación por encima de la mitad a muy poca distancia de Laura. Creo que esa fue la clave del sexto puesto final.

Por último la Larga. Como hemos comentado no íbamos en la condiciones óptimas, pero la verdad es que no fue una carrera excesivamente dura. Sí que es verdad  que al no ir del todo frescos, en las primeras balizas estabas un poco empanado, pero según avanzaba la carrera te ibas entonando. Eso es porque llevamos la orientación en la sangre. De nuevo volvimos a quedarnos detrás de los buenos. Esta carrera le salió bastante bien a Quique, que demostró durante todo el campeonato que si Alberto o yo fallábamos, ahí estaba él para aguantar la clasificación.

Una última reseña para Julito, nuestro Andand-o cartaginés. La verdad es que este no fue su CEU, ya que desde que se lesionó el tobillo en el CEO no ha conseguido brillar como solía, más por miedo a resentirse que otra cosa. Pero tras el reposo de este verano, y los entrenamientos motivados por estar a punto de ser ya Ingeniero, volverá a lo más alto. Después de todo, hace no mucho tiempo, era el mejor de todos, y el que tuvo, retuvo.