Los últimos coletazos

Por fin la universidad me da un ratín para hacer una entrada, espero que no se me haya olvidado esto de escribir. Vamos con cosillas.

Hace ya todo un mes, los días 12, 13 y 14 de octubre, se celebraron los 3 días de Lorca, a los que acudimos con presteza Alberto y yo, porque nos encanta meternos 750 kilómetros en coche los fines de semana. Nosotros 2, junto con otros 4 representantes del club, éramos no sólo una pequeña expedición del CDP-O, sino la única repesentación de la Liga Norte en la última liga Nacional de este curso, debido a que ese mismo fin de semana se celebró una triple Liga Norte en Urbasa, lo que obligó a tomar una difícil decisión: O me voy pa'rriba y me jodo de frío, o me voy pa'bajo y me jodo de calor. Y como la idea de la playa siempre tira, pues para el Sur que nos fuimos.

El primer día se celebró la distancia media, una carrera bastante rápida con una cartografía muy legible, al menos para mí, en la que, para variar, cometí los típicos errores que han hecho que me vea obligado a vivir un año (mínimo) de felicidad y descanso en H-21B.

La distancia larga fue todo un reto, sobretodo porque no había picado la baliza 4 y ya estaba pensando en la siesta que me iba a echar, así que servidor se arrastró como pudo entre bosques y cultivos y consiguió llegar a meta en poco más de 2 horas. A Alberto le fue parecido, pero a él le perdonamos, que para eso corre Élite y los demás no... entre el que está cojo y el que está en Letonia, como no suba Jorge me parece que el amigo Conejo se va a pasar la tira de años ahí solico.

Y ahora llega la parte de los 3 días en que dimos el callo, como héroes, como titanes, como...... como lo borrachos que somos. Justo aquí hay algún vacío de lo que fue la noche, que se produjo entre el sexto y el octavo cubata; pero vamos, que si queréis saber algo, preguntadle a parte de la Élite, que por allí rondaba tambien jejeje.

Y eso, que con un par de horas de sueño y toda la torza encima, tocaba dar el callo en la media urbana, de la que puedo decir que fue una auténtica pasada de carrera, sobretodo por la zona del casco antiguo, en la que realmente podías acabar perdido, cosa poco usual en las urbanas. En cuanto a los resultados, bueno, se hizo lo que el cuerpo buenamente permitió, pero forzando lo justito.

... Y despues?? Pues como teníamos todo el día por delante, y no sabíamos que hacer, nos dimos un paseito de 7 horas en coche hasta Pucela-City, por aquello de hacer hambre hasta la cena...

Por último, éste fin de semana participaremos en la última carrera del año, puntuable para el Campeonato de Castilla y León... a ver que nos han montado nuestros vecinos del COV para cerrar el año!